Fortín, Cueva de La Zarza y más.

Domingo, 29 de Enero de 2017.

Después de dos salidas impresionantes, hoy toca ruta casera, de estas de no coger el coche, impresionante también. El pasado otoño hicimos otra por estas sendas que rodean el Casco Antiguo, aunque aquel día nos fuimos un poco más lejos, lo podemos recordar en este enlace Por las sendas de Cuenca. En la ruta de hoy prácticamente podemos ir viendo la parte alta de Cuenca en todo momento, y tiene la ventaja de que se puede alargar o acortar según interese, en función de las fuerzas de cada cual.

Otra ventaja en estos casos es que nos evitamos el desplazamiento en coche, ganando un tiempo muy interesante. Nosotros vamos a subir desde la zona del barrio de Los Tiradores, por la fuente del Canto. Cogemos la senda que discurre bajo la linea de los pinos, para subir al Fortín, desde allí bajaremos al mirador del Rincón seco, sobre la hoz del Huécar, y por la senda de la Cueva de la Zarza llegaremos al Puente de San Pablo, subimos al Castillo por el sendero de los hocinos, bajamos por el escalerón desde el Castillo a la hoz del Júcar, hacia la ermita de San Juan de La Ribera, para volver caminando junto al río Júcar por la pasarela de madera a San Antón, dos hoces en una misma ruta, es que lo tenemos todo aquí al alcance de la mano.



Desde la Cueva de la Zarza, y con un poco de zoom, vemos una buena imagen del Casco Antiguo.

Nosotros empezamos la ruta a primera hora, hoy está nublado pero no llueve. Por este camino llegamos a la Fuente del Canto, seguimos senda arriba, hasta los pinos que vemos al fondo.

El sol intenta abrirse hueco entre las nubes.

Todas estas laderas del Cerro del Socorro, están plagadas de cuevas y restos de construcciones.

Aquí vemos restos de un muro junto a la cueva anterior.

Pequeños refugios o puestos de vigilancia, ¿quién lo sabe?.

Otro con el muro cubierto de ramas.

Hemos ganado altura y ya vemos allí a la izquierda los restos del fortín.

Desde el Fortín tenemos una buena vista del monumento del Cerro del Socorro y de buena parte del Casco Antiguo.

El comité de expertos analizando el terreno.

Hoy viene Javi, el más joven del grupo, hay que ir haciendo cantera.

Echamos un vistazo a todos los restos de la zona y continuamos la marcha.

Un vistazo a Cuenca.

Hoy hay una bruma que deja la fotografías algo empañadas.

Empezamos a bajar hacia la Hoz del Huecar.


Cruzamos la carretera y por el mirador del Rincón Seco, lo tenemos ahí delante, bajamos a la senda de la Cueva de la Zarza.

Gran cueva que albergaba casas y corrales.

Desde aquí, y tras la parada para almorzar, ponemos rumbo a Cuenca, cruzaremos el puente de San Pablo.

La gran noguera que encontramos junto a la cueva, ya tiene unos años a cuestas.

Un trago de agua en la fuente.

Pocas rutas de senderismo tienen un privilegio como este, cruzar el puente de San Pablo en una caminata no tiene precio.

Desde el sendero de Los Hocinos, echamos una mirada al camino que traemos, venimos por detrás de la iglesia de San Pablo.

Las vistas que nos ofrece este sendero son únicas.

Huertas en el fondo, parador, casas colgadas, parte trasera de la catedral, impresionante.

Un poco más cerca.

Volvemos a ganar altura y se abre la panorámica de la hoz del Huecar.

Continuamos entre muros y puertas de acceso a los hocinos, este sendero está muy bien acondicionado.

Cuando venimos por aquí, no podemos dejar de mirar los diferentes encuadres que aparecen a cada paso.

Seguimos subiendo, los cipreses nos informan de que llegamos al Hocino de Federico Muelas, hoy una completa rutina.

Enseguida llegamos al barrio del Castillo y saltamos de hoz, ahora pasamos a la hoz del Júcar, bajamos por el escalerón que encontramos junto al arco de Bezudo para tomar otra senda. Todo esto hay que venir a verlo, hay algunos tramos que no estamos enseñando hoy para que os animéis a venir a completar esta entrada.


Este escalerón pone a prueba las rodillas, que después de las subidas y bajadas de hoy, aquí se ponen tensas. Nosotros llegaremos hasta el fondo de la imagen, para volver por el camino que vemos allí abajo.

Este sendero también tiene un buen firme apto para todo el mundo.

Ya vemos el Júcar.

Nos ponemos junto al río, y disfrutamos con sus reflejos. Hoy las aguas están tranquilas.

Las rocas desprendidas de la hoz, permanecen impasibles dentro del cauce.

Rocas colonizadas por la vegetación, este pino en ocasiones se ve al borde del agua.

Cruzamos el puente sobre el aliviadero del Huecar.

Nos reciben los patos.

Y finalmente entramos en la urbe por el puente de la Trinidad, dejamos el de San Antón a la derecha y continuamos hacia el centro de Cuenca.


Una ruta de unos 14 km. mezcla de monte y ciudad disfrutando del paisaje Conquense, en todo este recorrido hay mucho más que ver, aquí solamente damos unas pinceladas de lo que os encontraréis cuando caminéis por estas sendas. 

Os dejamos el enlace al trazado y perfil de esta ruta:


Hasta pronto!!!


2 comentarios:

  1. Bonita excursión. Lástima que el tiempo no era el ideal para hacer fotos y disfrutarlo plenamente.
    Merece la pena, pero en primavera la disfrutaréis doblemente.

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